Los senadores estadounidenses Jim Risch y Chuck Grassley, miembros del Comité de Relaciones Exteriores del Senado de Estados Unidos, han exigido respuestas al gobierno de Joe Biden sobre la orden de captura de Nicolás Maduro.

Mediante una carta, se dirigieron al fiscal general Merrick Garland, secretario del Departamento de Justicia, y Antony Blinken, secretario del Departamento de Estado.

Están profundamente preocupados por la capacidad de Nicolás Maduro, un fugitivo de la justicia estadounidense, de eludir el arresto y la extradición a pesar de numerosos viajes internacionales desde enero de 2021.

Le han pedido que comparta con el Congreso qué acciones legales, si las hay, han tomado sus departamentos para buscar el arresto y extradición de Maduro desde enero de 2021.

Recordaron que el Departamento de Justicia anunció en marzo de 2020 acusaciones contra 15 funcionarios venezolanos, incluido Nicolás Maduro, por su presunta colaboración con altos miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia para utilizar cocaína como arma para “inundar” Estados Unidos.

Las acciones del régimen de Maduro han empeorado mucho esta situación, y recientes revelaciones de información del sistema judicial colombiano corroboran estas acusaciones. Desde 2021, el dictador venezolano ha viajado en al menos tres ocasiones a países con los que Estados Unidos tiene tratados de extradición: México (septiembre de 2021 y octubre de 2023) y Brasil (mayo de 2023).

En septiembre de 2021, Maduro asistió a una reunión de funcionarios latinoamericanos en México. En mayo de 2023, viajó a Brasil. Este octubre, tuvo el descaro de viajar nuevamente a México para participar en conversaciones sobre la crisis de inmigración ilegal provocada en gran parte por las acciones de la organización narcoterrorista que lidera