Zoë Kravitz ha compartido cómo la separación de sus padres, Lenny Kravitz y Lisa Bonet, la obligó a tomar una difícil decisión en su infancia: mudarse con su padre. En una reciente entrevista, la actriz admitió que fue “muy doloroso” alejarse de su madre. Aunque eligió irse a vivir con su papá, la experiencia no fue fácil, ya que Lenny, rockero y en constante gira, no estuvo presente tanto como Zoë esperaba.

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La actriz reveló que en aquel momento no logró apreciar lo que su madre hacía por ella, pues estaba más preocupada por preservar su inocencia y su creatividad. Estas declaraciones reflejan la complejidad emocional que vivió al tomar la decisión de mudarse a Nueva York con Lenny, después de abandonar la casa familiar en Miami. La ausencia de su padre durante sus giras aumentó esa sensación de dolor y confusión.

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A pesar de la separación de sus padres cuando Zoë tenía solo dos años, Lenny y Lisa han logrado mantener una relación cercana y respetuosa. Lenny confesó en 2020 que su conexión con Lisa sigue siendo “esencial”, aunque en una dinámica diferente. Zoë también mencionó que, durante su juventud, sintió que su padre, por su naturaleza confiada y amigable, a veces se aprovechaba de su tolerancia.