Controversia en la Primaria Rosaura Bravo: Hacen un Llamado a la Secretaría de Educación para auditoría de recursos
Reportero de Policiacas
La controversia en la Escuela Primaria Rosaura Bravo, ubicada en la calle 26 y privada de O’higgins en Chihuahua, persiste sin resolución tres días después de la protesta realizada por padres de familia el pasado viernes 6 de septiembre. Lo que comenzó como una manifestación por la falta de rendición de cuentas ha develado una crisis más profunda que involucra a la mesa directiva, la dirección escolar y la comunidad de padres.
Según reportes de los padres inconformes, la actual mesa directiva, encabezada por Pamela Rubio como presidenta y Jessica González como tesorera, ha mantenido su posición por más de cuatro años, negándose a ceder el espacio para una nueva administración. Esta situación ha generado tensiones significativas dentro de la comunidad escolar, llegando al punto en que algunos padres han expresado su preferencia por remover a la directora del plantel antes que mantener la actual mesa directiva.
La falta de transparencia en el manejo de los recursos financieros es el punto central de la controversia. Con una cuota anual de $1,200 pesos por alumno y una población estudiantil que supera los 600 niños, los padres de familia cuestionan el destino de estos fondos, que ascienden a más de 720,000 pesos anuales. La ausencia de eventos tradicionales como las celebraciones del Día del Niño, Día de la Madre y Día del Padre, a pesar del pago de cuotas, ha intensificado las sospechas de un posible mal manejo de los recursos.
“Es inaceptable que después de pagar puntualmente nuestras cuotas, no tengamos una explicación clara sobre cómo se están utilizando estos fondos”, expresó una madre de dos estudiantes. “Nuestros hijos merecen tener sus eventos escolares y una escuela en buenas condiciones. La falta de mantenimiento es evidente, y nos preguntamos dónde está el dinero que hemos aportado”.

La directora del plantel, Dalila Bojórquez, se encuentra en medio del conflicto. Por un lado, ha manifestado su disposición para apoyar a los padres de familia en sus demandas de transparencia y cambio. Por otro, enfrenta acusaciones de la mesa directiva, que según reportes de los padres, ha intentado intimidar tanto a docentes como a familias que buscan una renovación en la administración escolar.
“La directora Bojórquez ha sido la única que nos ha escuchado”, comentó otro padre de familia. “Pero cada vez que intentamos organizar una nueva mesa directiva, nos encontramos con obstáculos y amenazas veladas. Es como si quisieran mantener el control a toda costa”.
El conflicto ha escalado a tal punto que hay acusaciones de posible malversación de fondos. Los padres señalan que, además de la cancelación de eventos, varios desperfectos en la infraestructura escolar no han sido atendidos, a pesar de contar supuestamente con los recursos para hacerlo.
La comunidad escolar ahora exige la intervención de las autoridades educativas para realizar una auditoría exhaustiva de las finanzas de la escuela y facilitar la transición hacia una nueva mesa directiva. Sin embargo, hasta el momento, no se ha recibido respuesta oficial de las autoridades competentes.
Mientras tanto, el ambiente en la Primaria Rosaura Bravo se mantiene tenso. Los padres de familia han anunciado que continuarán con sus manifestaciones y están considerando medidas más drásticas si no se atienden sus demandas pronto. Por su parte, los miembros de la actual mesa directiva no han respondido a las solicitudes de comentarios sobre estas acusaciones.
Esta situación pone de manifiesto la necesidad de mayor supervisión y regulación en la gestión de recursos en las escuelas públicas por parte de gobierno del estado, así como la importancia de establecer mecanismos claros para la renovación de las mesas directivas y la participación activa de la comunidad escolar en la toma de decisiones.

