Desde que asumió el papel de Spider-Man en el Universo Cinematográfico de Marvel (UCM) en 2016, Tom Holland ha enfrentado un desafío constante: guardar secretos sobre las tramas y sorpresas de las películas. El actor británico ha admitido en más de una ocasión que evitar spoilers se ha vuelto una tarea casi imposible, describiendo la presión como “tortuosa”. Durante una reciente entrevista en Good Morning America, Holland recordó los momentos más difíciles de su carrera, especialmente al tratar de mantener en secreto las emocionantes apariciones de Tobey Maguire y Andrew Garfield en Spider-Man: No Way Home.

Holland confesó que fue “una tortura” no poder compartir el emocionante regreso de Maguire y Garfield en No Way Home, una de las películas más esperadas de Marvel que alcanzó una recaudación de casi dos mil millones de dólares a nivel mundial. Según el actor, mantener el secreto era crucial para sorprender a los fans, aunque la frustración de conocer estos detalles sin poder revelarlos resultó abrumadora. Su experiencia en el rodaje junto a Maguire y Garfield fue “divertida y nostálgica”, describiendo cómo el director Jon Watts les permitió improvisar en escena, lo que generó momentos únicos y memorables para los actores y el equipo.

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Con una cuarta entrega de Spider-Man ya en desarrollo, Holland sigue enfrentando el reto de guardar confidencialidad sobre la trama. Sin revelar mucho, adelantó que la nueva película ofrecerá “una idea muy loca” que superará las anteriores. Esta expectativa aumenta el entusiasmo de los seguidores, quienes ven en Holland a un actor comprometido con el personaje. En palabras del propio actor, “Spider-Man es el papel de mi vida”, y está más que dispuesto a seguir explorando al icónico héroe, manteniendo el misterio que tanto deleita a sus fans.