Amanda Bynes, exestrella infantil, ha decidido enfocar sus esfuerzos en mejorar su salud física y mental tras atravesar una fuerte depresión que la llevó a ganar más de 9 kilos en los últimos meses. Recientemente, la actriz compartió en redes sociales que está comprometida a bajar más de 20 kilos como parte de su proceso de recuperación, sorprendiendo a sus seguidores con esta meta personal. A pesar de sus dificultades, ha logrado avances significativos y ha adoptado un enfoque positivo y saludable en su vida.

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La actriz de 38 años relató cómo, en el pasado, sus problemas de imagen la llevaron a desarrollar inseguridades y adicciones. Durante su participación en películas como She’s the Man, Bynes experimentó una dismorfia corporal intensa al verse en pantalla, lo que la sumió en una depresión profunda. Esto, sumado a la presión de mantener una figura delgada, la llevó a abandonar la actuación en 2012. Años después, en 2013, sus padres tomaron la decisión de ingresarla en un centro psiquiátrico tras notar su obsesión con las cirugías estéticas y su autoimagen distorsionada, temiendo que estos deseos afectaran aún más su salud.

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Actualmente, Bynes está libre de adicciones y ha adoptado una rutina de ejercicios para mejorar su bienestar. Recientemente, compartió su logro de haber caminado casi 15,000 pasos en un día, lo que demuestra su compromiso con una vida más saludable. Aunque su objetivo es reducir su peso hasta los 49 kilos, Bynes ha subrayado que no se presiona excesivamente, buscando esta vez un balance entre cuerpo y mente.