Nota y Fotos por: Silver Juárez Arce

Entre el ajetreo cotidiano de la avenida Libertad, uno de los puntos más transitados de la ciudad, el artesano oaxaqueño Jonatan Castro ha encontrado su espacio para compartir el arte del macramé, una técnica ancestral que significa “tejer punto por punto”.

Sentado directamente sobre el pavimento, sus manos expertas entrelazan hilos y crean pulseras mientras los transeúntes pasan a su alrededor. “Cada pieza es única y está hecha completamente a mano”, explica Castro mientras sus dedos danzan entre los hilos.

El artesano ofrece una variedad de pulseras, algunas elaboradas en piel y otras tejidas artesanalmente con la técnica del macramé. Los precios son accesibles: cada pulsera tiene un costo de 40 pesos, aunque también ofrece una promoción de tres piezas por 100 pesos.

En medio del bullicio urbano, este artesano oaxaqueño representa la persistencia de las tradiciones artesanales mexicanas, transformando la concurrida avenida Libertad en un improvisado taller donde el arte manual cobra vida frente a los ojos de los chihuahuenses.