Mourinho pierde el control tras la eliminación del Fenerbahce
La tensión estalló en el clásico turco. Tras la derrota 2-1 del Fenerbahce ante el Galatasaray, que selló su pase a las semifinales de la Copa de Turquía, José Mourinho protagonizó un polémico altercado al encarar y tirar de la nariz al técnico rival, Okan Buruk.
El ambiente en el Ulker Sukru Saracoglu se tornó caótico en los minutos finales. Con el partido definido, la afición local arrojó objetos al campo cuando Victor Osimhen fue sustituido por Álvaro Morata. El árbitro intentó calmar los ánimos con tarjetas amarillas y expulsiones, pero la crispación se mantuvo hasta el pitazo final.
La escena más controvertida llegó al término del partido. Mourinho, visiblemente molesto, persiguió a Buruk, lo sujetó de la nariz y lo hizo caer al suelo, obligando a su cuerpo técnico a intervenir para evitar una confrontación mayor.
El portugués, en su primera temporada en Turquía, podría quedarse sin títulos, una situación que aumenta la presión sobre su gestión al frente del Fenerbahce.