Duelo de estilos en la Champions: así piensan los estrategas que buscan la gloria en Múnich
Los cuartos de final de la UEFA Champions League 2025 prometen algo más que fútbol de élite: ofrecen un choque de ideas tácticas entre entrenadores que representan filosofías muy distintas dentro del deporte. Ocho equipos de tradición y potencia llegan con libretas contrastantes a esta instancia definitiva rumbo a la gran final en el Allianz Arena de Múnich.
Carlo Ancelotti, al mando del Real Madrid, ha optado por un esquema 4-4-2, buscando velocidad al espacio con Vinícius Jr. y Kylian Mbappé como doble punta. El técnico italiano privilegia los pelotazos largos y una estructura pragmática, obligada por las lesiones que han condicionado su zaga y mediocampo.
En el Bayern Múnich, Vincent Kompany apuesta por un 4-2-3-1 vertical, con laterales profundos y presión adelantada. Su equipo se distingue por intensidad táctica, juego dinámico y la capacidad de forzar errores desde la salida rival, algo que ha sorprendido pese a su corta experiencia como técnico.
Por parte del Inter de Milán, Simone Inzaghi mantiene su característico 3-5-2, donde domina el juego interior, triangulaciones cortas y laterales que se suman al ataque. Busca movilidad táctica y múltiples líneas de pase, mezclando posesión con profundidad.
El Barcelona, con Hansi Flick, ha fusionado su impronta vertical con la esencia culé: posesión, presión alta y transiciones rápidas. Con un 4-2-3-1, el alemán ha sabido mantener la identidad blaugrana, apostando por castigar errores rivales y recuperar pronto el balón.
El Borussia Dortmund, dirigido por Niko Kovac, emplea también un 3-5-2, aunque con énfasis en los carriles exteriores y el control de espacios cortos. Suele replegar y contraatacar, además de defender forzando el juego hacia las bandas para activar sus transiciones.
Luis Enrique, al frente del Paris Saint-Germain, construye desde un 4-3-3 enfocado en esperar, defender con orden y explotar la velocidad de sus delanteros. El español recurre a los laterales bajos y la profundidad en ataque para encontrar espacios a las espaldas de los defensores.
En el sorprendente Aston Villa, Unai Emery ha reforzado un clásico 4-4-2 defensivo, con un bloque medio sólido, dominio del carril central y salidas rápidas por los extremos. Su estilo se basa en la solidez táctica y el aprovechamiento de cada transición.
Por último, Mikel Arteta y su Arsenal alternan entre 4-3-3 y 4-2-3-1, según la necesidad. Con una escuela heredada de Pep Guardiola, el español apuesta por flexibilidad táctica, posesión inteligente y presión organizada, lo que ha devuelto a los Gunners a la élite europea.
Cada técnico lleva una idea clara y una identidad definida. Esta etapa de la Champions será tanto una batalla de jugadores como un pulso entre mentes maestras del banquillo, en donde solo uno podrá alzar la orejona el 31 de mayo en Múnich.
