Luka Modrić, emblema del Real Madrid y uno de los jugadores más trascendentales en la historia reciente del club, pondrá fin a su etapa en el conjunto blanco tras la disputa del Mundial de Clubes 2025. Con esta decisión, concluye una era marcada por el talento, la elegancia y una colección histórica de títulos.

El club madridista lo anunció oficialmente este miércoles, confirmando que ha alcanzado un acuerdo con el centrocampista croata para cerrar su ciclo después de trece temporadas ininterrumpidas. Modrić, por su parte, compartió un emotivo mensaje de despedida en sus redes sociales, reconociendo que “el momento que nunca quiso que llegara, finalmente ha llegado”.

Desde su llegada en 2012, procedente del Tottenham, Modrić se consolidó como una figura clave en una de las etapas más exitosas del club merengue. Durante su paso por el Real Madrid, ha conquistado 28 títulos, entre los que destacan 6 Copas de Europa, 6 Mundiales de Clubes, 4 Ligas y 2 Copas del Rey, convirtiéndose en el jugador más laureado en los 123 años de historia de la institución.

Además, su impacto trascendió los logros colectivos. En 2018 rompió la hegemonía de Messi y Cristiano al alzarse con el Balón de Oro, el Premio The Best de la FIFA y el galardón a Jugador del Año de la UEFA, reconociéndose así su papel en la conquista de la Champions y en la histórica campaña de Croacia en el Mundial de Rusia. Ha sido elegido 6 veces en el Once Mundial FIFPro y 2 como Mejor Centrocampista de la Champions League.

Este sábado, en el Santiago Bernabéu y ante la Real Sociedad, disputará su último encuentro de Liga como local, donde el club le rendirá un homenaje merecido. “Me voy con el corazón lleno. Lleno de orgullo, de gratitud y de recuerdos imborrables. Aunque ya no vista esta camiseta, siempre seré madridista”, expresó en su emotiva despedida.

Con su salida, el Real Madrid no solo pierde a un jugador excepcional, sino a un símbolo de liderazgo, humildad y compromiso. Modrić deja una huella imborrable en el club y en el fútbol mundial, cerrando una etapa dorada que será recordada por generaciones.