La cantante estadounidense Britney Spears volvió a estar en el centro de la controversia tras protagonizar un incidente en pleno vuelo privado. Durante un viaje desde Cabo San Lucas, México, hacia Los Ángeles, la artista fue reprendida por la tripulación luego de fumar y consumir bebidas alcohólicas a bordo. El comportamiento alarmó a las azafatas, quienes le solicitaron de inmediato que apagara el cigarro.

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Tras el aterrizaje, la policía ya se encontraba esperándola para advertirle sobre su actitud durante el trayecto. Aunque no hubo consecuencias legales, el hecho llamó la atención debido a los antecedentes recientes de la cantante. Según reportes de TMZ, quienes la rodean aseguran que los problemas de salud mental siguen afectando su rutina diaria, lo que podría explicar estos comportamientos erráticos.

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Durante su estancia en México, Britney fue vista bailando en Los Cabos con un vestido rojo y gran entusiasmo, además de pasear por las calles de San José del Cabo, donde incluso se detuvo a comprar dulces a un vendedor ambulante. Estas escenas contrastan fuertemente con el episodio en el vuelo, lo que refuerza las preocupaciones en torno a su bienestar emocional.