La situación en Oriente Medio ha escalado rápidamente. El Comando Central de EE. UU. (CENTCOM) ha autorizado la evacuación parcial de personal militar y diplomático en varios países de la región, incluyendo Irak, Bahrein y Kuwait. Esta medida responde a las crecientes amenazas de Irán, que ha advertido que atacará bases estadounidenses si se intensifican las agresiones.

Aunque no se ha confirmado una retirada total de tropas, sí se ha permitido la salida voluntaria de familiares de militares y personal no esencial. La embajada en Bagdad ya inició su reducción operativa, mientras que otras instalaciones estratégicas, como la base aérea de Al Udeid en Qatar, siguen funcionando con normalidad.

En paralelo, EE. UU. ha desplegado una fuerza aérea significativa en la región: cazas F-35, F-22 y F-16, junto con aviones de carga C-17 y cisternas KC-135 y KC-46, han sido movilizados hacia bases en Europa y Medio Oriente. Este despliegue sugiere una preparación activa para operaciones aéreas de gran escala, en respuesta a la Operación León Naciente de Israel contra Irán.

Todo apunta a que el conflicto podría entrar en una fase aérea intensiva, con implicaciones regionales e internacionales. Si quieres, puedo ayudarte a armar una cobertura especial o un hilo informativo para redes con visuales y datos clave.