El reconocido actor surcoreano Song Young-kyu fue hallado sin vida dentro de su automóvil la mañana del lunes 4 de agosto, en un complejo residencial de Yongin, al sur de Seúl. La noticia ha conmocionado a la industria del entretenimiento coreano, donde Song fue una figura constante durante más de tres décadas.

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De acuerdo con la policía local, el cuerpo fue encontrado por una persona cercana al actor, sin señales de violencia ni presencia de una nota de suicidio. Aunque las autoridades ya iniciaron una investigación para esclarecer las causas del deceso, su fallecimiento ha generado múltiples reacciones, especialmente por el contexto reciente en el que se encontraba envuelto.

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En junio de este año, Song Young-kyu enfrentó críticas públicas tras ser detenido por conducir en estado de ebriedad, con un nivel de alcohol en sangre superior al permitido. Esta situación lo llevó a perder su licencia de conducir, a retirarse de la obra Shakespeare in Love y a ver reducida su participación en las series The Winning Try y The Defects, aún en emisión.

Con una carrera iniciada en 1994 en el teatro infantil, Song acumuló más de 50 apariciones en cine y televisión. Fue especialmente recordado por su papel en Extreme Job (2019), uno de los filmes más exitosos en la taquilla surcoreana, además de sus actuaciones en Hwarang, Hot Stove League, Narco-Santos y Big Bet.

Considerado uno de los actores de reparto más sólidos de su generación, Song Young-kyu deja un legado artístico profundo, marcado por su versatilidad y compromiso escénico. Su repentina muerte ha reavivado la preocupación por la salud mental y la presión mediática que enfrentan las celebridades en Corea del Sur. Le sobreviven su esposa y dos hijas.