La serie documental Marcial Maciel: El lobo de Dios, que llega esta semana a HBO Max, expone la oscura trayectoria del fundador de los Legionarios de Cristo, quien por más de cinco décadas evadió denuncias por abuso sexual contra decenas de menores. Protegido por una red de poder político y eclesiástico, Maciel construyó una imagen intocable mientras ocultaba una historia de corrupción, manipulación y crímenes impunes.

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Dirigida por Matías Gueilburt y producida por Sebastián Gamba, la producción busca mostrar más que los abusos cometidos por el sacerdote; pretende revelar al “monstruo de mil cabezas” que operó con total libertad en México, América Latina y Europa. Con testimonios de periodistas, especialistas y víctimas, así como material de archivo inédito, la serie reconstruye el ascenso de Maciel desde Cotija hasta el Vaticano, desnudando la doble vida que mantuvo durante décadas.

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El documental también aborda el impacto emocional de las víctimas y el reto de narrar sus historias sin revictimizarlas. Entre los hallazgos más reveladores se incluyen grabaciones y fotografías nunca antes vistas, que muestran a un Maciel carismático en público, pero perverso en privado. A pesar de su muerte en 2008, su legado de abuso y encubrimiento sigue marcando a la iglesia católica, y esta producción llega para confrontar un pasado que muchos aún intentan silenciar.