Han pasado 71 días desde que Cruz Azul anunció la salida de Vicente Sánchez de la dirección técnica, y la ‘Máquina’ ha vivido un periodo de turbulencias dentro y fuera del campo. La llegada de Nicolás Larcamón, la contratación de refuerzos, las bajas de futbolistas y las derrotas contundentes han marcado este inicio de proyecto. Tras la victoria sobre Atlético de San Luis, Larcamón pidió paciencia para consolidar su estrategia y adaptarse al equipo.

La directiva de Cruz Azul exploró nombres como Guillermo Almada, Matías Almeyda y Gabriel Milito antes de decidir pagar la cláusula de rescisión de Nicolás Larcamón a Necaxa, asegurando su llegada apenas un mes antes del Apertura 2025. Bajo su dirección, el club solo ha sumado dos refuerzos: José Paradela, solicitado por Larcamón por su experiencia juntos en Necaxa, y Jeremy Márquez, procedente de Atlas.

El mercado de fichajes estuvo marcado por la posibilidad de contratar a Luka Jovic, mientras que Giorgos Giakoumakis y Gabriel Fernández vivieron situaciones complicadas por sus altos salarios. Además, Cruz Azul mantiene un registro negativo en la Leagues Cup, con diez partidos sin victoria en 90 minutos reglamentarios. La reciente goleada 7-0 ante Seattle Sounders y las pifias de Kevin Mier han puesto a prueba la paciencia de la afición, mientras la posible salida de Gonzalo Piovi amenaza con desestabilizar la defensa rumbo al Apertura 2025.