Vivian Jenna Wilson, hija mayor transgénero de Elon Musk, confesó en entrevista que a pesar de ser descendiente del hombre más rico del mundo, lleva una vida modesta y sin apoyo económico por parte de su padre. La joven de 21 años explicó que desde 2022, cuando cambió legalmente su nombre y género, también se distanció por completo del empresario.

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En la charla con The Cut, Vivian aclaró que la gente suele asumir que cuenta con una fortuna, pero en realidad comparte departamento con tres amigos para reducir gastos y depende parcialmente de su madre, la escritora Justine Musk. Aunque admite que cubre sus necesidades básicas, enfatizó que no tiene intención de ser una mujer privilegiada. “No tengo ningún deseo de ser súper rica”, expresó.

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La joven, quien dejó sus estudios universitarios tras pasar por Canadá y Japón, mencionó que considera retomar su carrera en idiomas extranjeros, aunque el costo es una barrera. Además, habló de la compleja relación con su padre, a quien ha criticado públicamente desde su ruptura familiar, y reveló que incluso debe disfrazarse en bares LGBTQ+ para evitar el acoso y las agresiones transfóbicas. A pesar de su incomodidad con la fama, reconoció que su trabajo como modelo le ha permitido cierta independencia económica.