Nota y fotos por: Silver Juárez Arce

Una conmovedora escena se vivió esta mañana frente a la Presidencia Municipal de Chihuahua, donde un niño, con inocencia y orgullo, se sentó a ondear su bandera de México, anticipándose a las fiestas patrias.

Vestido con una playera de la Liga Mexicana de Fútbol en los colores verde y blanco, el pequeño se convirtió en un espontáneo símbolo de patriotismo. Sentado tranquilamente en la plaza, su pequeña bandera flameaba con cada movimiento de su brazo, dibujando sonrisas entre los transeúntes y vecinos que se dirigían a sus labores diarias.

La imagen del niño, disfrutando de la mañana en el centro de la ciudad, contrastó con la bulliciosa preparación para la celebración oficial, recordando que el fervor patrio también se vive en los gestos simples y auténticos. Su presencia espontánea añadió un toque de pureza y alegría a los preparativos del 15 de septiembre.