La actriz Emma Watson, recordada por su icónico papel de Hermione Granger en la saga de Harry Potter, rompió el silencio sobre su prolongada ausencia de la pantalla grande. En una entrevista con Hollywood Authentic, confesó que decidió alejarse desde 2018, tras finalizar el rodaje de Mujercitas, para priorizar su salud mental y encontrar equilibrio en su vida personal. Aseguró que la presión mediática y las exigencias de la industria le resultaron “devastadoras para el alma”, aunque admitió que extraña el proceso creativo de la actuación.

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Watson explicó que el verdadero peso de su carrera no radicaba en actuar, sino en ser una figura pública constante. “La mayor carga no era interpretar, sino vender cosas”, afirmó, dejando claro que la parte comercial fue determinante para su retiro. Pese a ello, reconoció que la intensidad frente a las cámaras era una experiencia única, una “forma de meditación” que aún valora profundamente.

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Lejos de los reflectores, Emma ha dedicado estos años a fortalecer su vida personal, enfocándose en amigos, familia y en un estilo de vida más saludable. Aunque no descarta regresar al cine, dejó claro que lo hará solo bajo sus propios términos. Incluso habló de su relación con J.K. Rowling, señalando que, a pesar de sus diferencias sobre los derechos trans, mantiene respeto y afecto por la autora, mostrando que el cariño y el desacuerdo pueden coexistir.