Corona: de leyenda a dinastía en la portería
Jesús Corona se retiró oficialmente a los 44 años tras un recorrido de 22 años y medio en el futbol profesional, dejando una huella imborrable en Cruz Azul y en la Liga MX. El histórico portero, recordado por romper la sequía de títulos de la Máquina y brillar en Londres 2012, cierra su etapa como jugador, pero su apellido seguirá vigente gracias a su hijo José Miguel Corona, portero de Tijuana de 15 años y prospecto de la Selección Mexicana en categorías inferiores.
La tradición de los Corona Rodríguez en las porterías comenzó con Gilberto Rodríguez, abuelo de Jesús, y continuó con sus tíos Gilberto ‘Coco’ y Estéfano Rodríguez. Ahora, José Miguel hereda la estafeta familiar, llevando en su ADN cuatro generaciones de porteros. Jorge ‘Vikingo’ Dávalos, quien vio crecer al joven guardameta, asegura que “manifiesta una madurez como si hubiera tomado lo mejor de todas las generaciones” y destaca su capacidad física y técnica para llegar a la Primera División e incluso a Europa.
Jesús Corona padre compara los inicios de su hijo con los de su nieto, señalando que José Miguel, al igual que ‘Chuy’ en su momento, demuestra un gran entusiasmo y talento desde pequeño. Oscar ‘Conejo’ Pérez, exentrenador de porteros en Cruz Azul, resalta su seguridad, técnica y potencial, afirmando que “acompañado por su padre, seguramente trascenderá y llegará muy lejos”.
Tras la salida de Jesús Corona de Cruz Azul hacia Tijuana, también se trasladó José Miguel, quien había sido considerado una de las mayores promesas de la cantera celeste. Jorge ‘Vikingo’ Dávalos lamenta que el club no retuviera a padre e hijo, subrayando la importancia de cuidar a los ídolos para fortalecer el futbol mexicano. Hoy, José Miguel Corona asume la responsabilidad de continuar la dinastía familiar en la portería, llevando consigo el legado de los Corona Rodríguez.