La reconocida cantante y actriz Selena Gomez ha sido una de las pocas celebridades que ha decidido hablar abiertamente sobre su salud mental, compartiendo con el mundo las batallas internas que ha enfrentado desde hace varios años. La intérprete de Lose You To Love Me reveló haber padecido ansiedad, depresión y ataques de pánico, situaciones que la obligaron en distintas ocasiones a pausar su carrera para priorizar su bienestar emocional.

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Durante una transmisión en vivo en 2020 junto a Miley Cyrus, la artista confesó haber sido diagnosticada con trastorno bipolar, un momento que marcó un antes y un después en su vida. Lejos de derrumbarse, Selena aseguró sentirse aliviada al comprender lo que sucedía en su mente, lo que le permitió enfocarse en un tratamiento adecuado y hablar públicamente del tema, inspirando a millones de personas a hacer lo mismo.

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Su lucha no se limita a la bipolaridad. Gomez también ha enfrentado episodios de psicosis y ha lidiado con las consecuencias emocionales del lupus, enfermedad que afectó su autoestima por los cambios físicos y los fuertes medicamentos. Sin embargo, su valentía la llevó a transformar su dolor en acciones concretas a través de su fundación Rare Impact Fund, con la cual impulsa proyectos de atención psicológica para jóvenes en todo el mundo.

Hoy, Selena Gomez continúa aprendiendo a vivir con su condición, apoyada por su esposo Benny Blanco y su círculo más cercano. Su historia se ha convertido en un símbolo de resiliencia, demostrando que incluso en medio de la fama, la verdadera fortaleza nace de aceptar la vulnerabilidad y buscar ayuda para sanar.