La actriz Emma Stone volvió a demostrar su compromiso con la actuación al raparse la cabeza realmente durante la filmación de Bugonia, su más reciente colaboración con el director Yorgos Lanthimos. En una escena clave, la ganadora del Óscar tuvo que someterse a una toma única, sin posibilidad de repetirla, lo que elevó la tensión y el simbolismo del momento. Lo que muchos creyeron un truco de maquillaje o efectos visuales, resultó ser una transformación auténtica y profundamente significativa para la intérprete.

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En una entrevista con Entertainment Weekly, Stone explicó que la secuencia fue grabada en una sola toma, utilizando cuatro cámaras y sin margen de error. Su personaje, una directora ejecutiva secuestrada por conspiranoicos, es obligada a raparse como parte de un ritual simbólico. “Solo pensaba en quedarme quieta, en hacerme la muerta”, comentó la actriz, recordando el nivel emocional que implicó la escena.

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La película Bugonia, que llegará a los cines el 4 de diciembre, adapta la cinta surcoreana Save the Green Planet! (2003) y explora temas como la paranoia, las teorías conspirativas y la percepción de la realidad. La imagen de Stone calva se ha convertido en el eje visual de la promoción, incluso inspirando un evento en Los Ángeles donde los asistentes se raparon para emularla. Con esta interpretación, Emma reafirma su reputación como una de las actrices más comprometidas y arriesgadas de su generación.