El FC Barcelona se encuentra en plena deliberación sobre la fecha de reapertura del Camp Nou, que podría concretarse el 22 de noviembre ante el Athletic Club o el 29 frente al Alavés. La decisión depende de que el Ayuntamiento de Barcelona autorice la licencia Fase B, la cual permitiría el acceso de 47 mil aficionados al remodelado Spotify Camp Nou.

Aunque el club ya cuenta con un permiso para recibir a 25 mil personas, optó por posponer su regreso, ya que los partidos en el Estadi Olímpic mantienen una media de 45 mil asistentes, generando mayores ingresos que un retorno limitado al Camp Nou. No obstante, el presidente Joan Laporta y su directiva confían en recibir la aprobación municipal antes del 22 de noviembre, lo que marcaría un paso clave en la recuperación económica del club.

El Barça considera también esperar hasta el 29 de noviembre, fecha en la que el equipo celebrará su 126 aniversario, para volver a casa con un evento más simbólico. “Todo está preparado mientras esperamos luz verde del Ayuntamiento”, señalaron fuentes del club, que mantienen el optimismo respecto al avance del proyecto.

Como parte de las pruebas finales, el próximo viernes se realizará un entrenamiento a puertas abiertas en el Camp Nou para evaluar el funcionamiento de los accesos. Los asistentes ocuparán las zonas de Tribuna y Gol Sur, con boletos que van desde 5 euros para socios hasta 10 euros para el público general. Este ensayo marcará el preludio del tan esperado regreso del conjunto azulgrana a su estadio histórico.