Lewis Hamilton quedó eliminado en la P11 de la clasificación sprint del Gran Premio de Brasil 2025, luego de que su compañero Charles Leclerc perdiera el control de su SF-25 en la curva de la herradura, provocando una bandera amarilla justo cuando el británico buscaba mejorar su tiempo de 1:09.811. El incidente ocurrió en los últimos instantes de la SQ2, arruinando las opciones del siete veces campeón de avanzar a la SQ3.

Hamilton tenía posibilidades reales de clasificar entre los mejores cuando Leclerc empujó de más en la entrada de la curva, perdió el control y protagonizó un trompo que cambió por completo el rumbo de la sesión. La maniobra obligó a Hamilton a levantar el pie del acelerador y abandonar su intento rápido, quedando fuera de la pelea por los primeros lugares. Su frustración quedó reflejada en la radio con su ingeniero, Riccardo Adami, al responder con un seco “Every time, mate”, dejando claro que este tipo de situaciones se repiten con frecuencia desde su llegada a Ferrari.

Mientras Hamilton se quedaba fuera, Leclerc avanzó a la siguiente ronda y se colocó en la tercera posición, pese a ser el causante del incidente. La ironía del resultado no pasó desapercibida: el error del monegasco lo dejó beneficiado, mientras su compañero resultó eliminado.

El problema de fondo parece más profundo dentro de Ferrari. Desde la llegada de Hamilton, las tensiones internas se han incrementado: en Azerbaiyán, el británico ignoró órdenes de dejar pasar a Leclerc; en España, surgió confusión sobre quién es el piloto número uno. Ahora, en Brasil, un nuevo error del monegasco vuelve a afectar directamente al siete veces campeón. El jefe de equipo, Fred Vasseur, enfrenta un desafío serio, ya que cualquier decisión que favorezca a uno de los pilotos será vista con sospecha tras episodios como el vivido en Interlagos.