Durante la premiere de Wicked: For Good en Singapur, un joven identificado como Johnson Wen, conocido en redes como Pyjama Man, burló la seguridad para intentar “abrazar” y brincar junto a Ariana Grande. El incidente, ocurrido el 13 de noviembre, reavivó las críticas hacia este influencer que ha construido su fama invadiendo el espacio personal de celebridades.

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Wen, de 26 años y originario de Australia, se autoproclama como el “troll más odiado”. En Instagram y TikTok reúne más de 23 mil seguidores, donde comparte videos de sus invasiones y presume haber convertido este comportamiento en un “hobby”. Incluso abrió una campaña en GoFundMe para cubrir “sus facturas”, donde busca recaudar 35 mil dólares, aunque apenas ha recibido 5 dólares.

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Además de sus irrupciones en alfombras rojas, Pyjama Man ha ingresado a conciertos usando playeras con mensajes políticos como “liberen Ucrania” o “liberen Palestina”. En junio logró pararse junto a Katy Perry durante su show en Sídney; dos meses después hizo lo mismo en el concierto de The Weeknd en Melbourne, quien tuvo que alejarse al notar que Wen intentaba abrazarlo. También irrumpió en un show de The Chainsmokers en 2024.

Sus actos no se limitan al entretenimiento: ha invadido eventos deportivos como la final del Mundial Femenil 2023, la Cricket World Cup en India y hasta competencias de los Juegos Olímpicos de París 2024, donde fue detenido tras correr dentro de la pista.

El comportamiento reiterado de Pyjama Man podría acarrearle consecuencias legales, especialmente por el reciente incidente con Ariana Grande. Aunque él presume estos momentos en redes sociales, sus acciones evidencian una grave falta de respeto y ponen en riesgo la seguridad de artistas y asistentes.