Andy López Beltrán y el dilema de la militancia: ¿10 millones de afiliados o 7 millones de convencidos?

Resumen clave: Morena cerró 2025 con más de 10 millones de afiliados, según Luisa María Alcalde, pero persisten dudas internas sobre la solidez de esa base. El Banco del Bienestar, con 31 millones de clientes, refleja la magnitud del reto para convertir beneficiarios en militantes comprometidos.

El 2025 fue un año turbulento para Andrés Manuel López Beltrán, “Andy”, secretario de Organización de Morena. El partido cerró el año con un anuncio histórico: más de 10 millones de afiliados registrados ante el INE, cifra que lo convierte en la fuerza política más grande de México y América Latina. La dirigente nacional, Luisa María Alcalde, celebró el logro como un hito de la campaña “Súmate a Morena”.

Sin embargo, detrás del festejo, persisten recelos internos. En el entorno de Alcalde se estima que los militantes realmente comprometidos rondan los 7 millones, y que el resto son afiliaciones logradas a base de sumar simpatizantes sin un vínculo real con la marca. “Por ese manejo es que se perdió la elección de Durango, se trajo a todo el PRI a Morena y al momento de la verdad no fueron a votar”, deslizan voces cercanas a la presidenta del partido.

El contraste con el Banco del Bienestar

La comparación se vuelve más compleja al observar los números del Banco del Bienestar, institución clave para la dispersión de programas sociales. Según datos oficiales, la entidad dirigida por Víctor Lamoyi cerró 2025 con 31 millones de clientes, casi todos beneficiarios de apoyos sociales. La cifra es cercana a los 30 millones de clientes de BBVA, el banco privado más grande del país.

En Morena reconocen que, con ese universo de beneficiarios, el voto movilizado debería ser más alto. Sin embargo, la conexión entre los apoyos sociales y la militancia efectiva de la 4T no siempre se traduce en participación política.

Tensiones internas y dudas sobre la operación

LPO reveló que Andy López Beltrán ha expresado dudas sobre el manejo de los delegados de Bienestar en los estados, a quienes acusa de estar más enfocados en disputas locales que en movilizar a los beneficiarios de los programas. Estas tensiones reflejan el dilema de Morena: cómo transformar una base social amplia en una militancia activa y disciplinada.

Entre la celebración y la crítica

Mientras Alcalde defiende públicamente a Andy, asegurando que es juzgado de manera “exagerada” por ser hijo del expresidente López Obrador, las críticas internas apuntan a que la estrategia de afiliación masiva podría inflar números sin garantizar fidelidad electoral.


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Morena presume músculo con 10 millones de afiliados, pero en la práctica parece que muchos solo se apuntaron para la foto. La militancia real, como el voto duro, sigue siendo un número más difícil de inflar.