Nota y Fotos por: Silver Juárez Arce

En la Col. Industrial de Chihuahua, se llevó acabo como todos los jueves el tianguis que atrajo a numerosos residentes en busca de ofertas, gastronomía y productos tradicionales. Este evento, que forma parte de la comunidad chihuahuense, ofrece una amplia gama de artículos, desde ropa hasta árboles de Navidad, consolidándose como una opción integral para los compradores.

Entre los diversos puestos, nos encontramos con el vendedor Aldo Ochoa, quien ofrece una curiosa solución para el estrés: una cobija pesada. Este singular producto se ha vuelto popular entre los visitantes, quienes comentan que cargarla elimina tensiones y proporciona una experiencia relajante.

En otro rincón del tianguis, hablamos con Silvia Gutiérrez, quien lleva más de 15 años participando en este evento. Destacó la frescura y calidad de los productos, desde carnitas hasta frutas y verduras, subrayando la diversidad y buenos precios que caracterizan al tianguis.

Además, no faltan los sabores auténticos de la gastronomía zacatecana. Yaneth, originario de Zacatecas, nos invitó a degustar los tamales zacatecanos, resaltando la diferencia en sazón y técnica de preparación en comparación con los tamales locales. También destacó la riqueza de ingredientes, como el epazote y otras hierbas que aportan un toque distintivo.

El tianguis, que cuenta con más de 40 años de tradición, se erige como un punto de encuentro para la comunidad, ofreciendo no solo bienes materiales, sino también experiencias culturales y culinarias. Los visitantes disfrutan de un ambiente festivo y la oportunidad de explorar las diversas ofertas que este mercado callejero tiene para ofrecer.

Cada jueves, de 6 de la mañana hasta las 2 o 3 de la tarde, los residentes de Chihuahua tienen la oportunidad de sumergirse en esta experiencia única que combina lo tradicional con lo contemporáneo, brindando a la colonia industrial un motivo más para congregarse y disfrutar de la vida comunitaria. Este vibrante tianguis, que ha resistido el paso del tiempo, continúa siendo un tesoro local que enriquece la identidad y el tejido social de la ciudad.