América y LAFC se preparan para un enfrentamiento clave que definirá al último invitado al próximo Mundial de Clubes FIFA, tras la descalificación de León, quien había ganado su lugar en la edición 2023 de la Concacaf Champions Cup, pero fue excluido por la FIFA y el TAS debido a violaciones en materia de multipropiedad.

El conjunto azulcrema aún aguarda la confirmación oficial de la sede y la fecha del partido, aunque fuentes cercanas a la organización apuntan al 31 de mayo como el día señalado para disputar el encuentro. Sin embargo, la elección del estadio continúa siendo motivo de tensión. América ha expresado su rechazo total a jugar en el BMO Stadium, casa del LAFC, por considerarlo una ventaja deportiva para los estadounidenses. La directiva ha propuesto otras alternativas en Los Ángeles, como el SoFi Stadium, Dignity Health Sports Park, Memorial Coliseum y el Rose Bowl.

La logística representa un reto adicional para la FIFA, ya que varios de estos recintos tienen eventos agendados para esa misma fecha. A pesar de ello, el Memorial Coliseum y el propio BMO Stadium permanecen como opciones viables. Por su parte, el LAFC ya ha reprogramado su compromiso liguero contra los Colorado Rapids, que coincidía con la posible fecha del duelo.

La elección del América como contendiente se debe a su posición como el mejor equipo en el ranking de la CONCACAF, lo cual, según la normativa del máximo organismo del fútbol, le da el derecho a disputar este partido único. En el caso del LAFC, su presencia se justifica por haber sido el finalista derrotado ante León en la última Concacaf Champions Cup.

La definición de este cupo ha generado expectativa no solo por lo deportivo, sino también por las implicaciones institucionales y logísticas que enfrenta la organización del evento. En los próximos días, la FIFA hará oficial el anuncio tras concluir su Congreso en Paraguay, cerrando así la incertidumbre en torno a este esperado encuentro.