Jude Bellingham, galardonado como Jugador del Año de Inglaterra 2024-25, sorprendió al no ser convocado por el entrenador Thomas Tuchel apenas 48 horas después de recibir el premio. La decisión, según Tuchel, se debe a la falta de minutos de juego tras su cirugía de hombro en verano; Bellingham apenas ha sido titular en un partido y no ha completado los 90 minutos esta temporada con el Real Madrid.

El técnico alemán destacó la importancia del espíritu de equipo y la química entre jugadores, apuntando que la concentración de septiembre fue la mejor de su etapa al mando de Inglaterra. Para los encuentros de octubre, Tuchel mantuvo casi todo el grupo, reemplazando solo al lesionado Noni Madueke por Bukayo Saka, e incluyendo a Jarell Quansah y Ruben Loftus-Cheek. “Queremos desarrollar algo especial y dependemos del rendimiento colectivo”, explicó Tuchel, quien subrayó que depender de un solo jugador nunca puede ser la solución.

Aunque Bellingham sigue siendo considerado uno de los mejores mediocampistas del mundo, su ausencia abre espacio para alternativas como Morgan Rogers, Gibbs-White y Loftus-Cheek. La decisión también dejó fuera a Phil Foden, a pesar de que expertos y entrenadores coinciden en su rendimiento óptimo cuando juega de mediocentro.

La omisión de Bellingham ha generado debates sobre su rol en la selección, pero Tuchel insistió en que no existe conflicto interno con el jugador. Fuentes señalan que el entrenador busca enviar un mensaje claro sobre disciplina y rendimiento, dejando la puerta abierta a su regreso según su evolución en el Real Madrid.

Compañeros como Anthony Gordon destacaron la influencia de Bellingham dentro del equipo, pero reconocieron que el parón podría permitirle recuperar ritmo tras un periodo complicado de lesiones. Tuchel confía en que su presencia en el club español le permitirá estar en forma para la fase clave de la Champions League y el próximo Clásico contra el Barcelona, reforzando su eventual retorno a Inglaterra.