Bengals analiza dejar Cincinnati en 2026: su futuro en Paycor Stadium está en juego
Los días de los Cincinnati Bengals en el Paycor Stadium podrían estar contados. La franquicia de la NFL está considerando seriamente la posibilidad de cambiar de sede a partir del año 2026, si no se alcanza un acuerdo con el Condado de Hamilton para extender su permanencia en la ciudad.
De acuerdo con información del diario Cincinnati Enquirer, Katie Blackburn, vicepresidenta ejecutiva del equipo, confirmó que aún están en proceso de evaluación sobre la continuidad en el inmueble ubicado en Ohio, cuya relación contractual está programada para concluir el 30 de junio de 2026.
Si bien existe una cláusula que permitiría extender el arrendamiento por dos años más, la directiva del equipo deberá tomar una decisión definitiva antes del 30 de junio de este año. En caso de no activarse dicha opción, el camino quedaría abierto para que los Bengals exploren otras ciudades.
“Todo esto se resolverá a su debido tiempo. Estamos en conversaciones, así que esperamos que el Condado también esté pensando mucho en ello, y quiera abordarlo de una manera que sea beneficiosa para ambos”, expresó Blackburn, quien evitó mencionar destinos alternativos, pero dejó claro que no descartan una mudanza si no se concreta un acuerdo satisfactorio.
La dirigente también destacó la importancia de que el estadio reciba el mantenimiento y las mejoras necesarias para mantener la competitividad del equipo, tanto a nivel deportivo como en infraestructura.
Situación contractual y deportiva en paralelo
Mientras el futuro del equipo fuera del emparrillado se mantiene incierto, en el plano deportivo los Bengals han trabajado en asegurar a sus figuras clave. Recientemente renovaron a los receptores estrella Ja’Marr Chase y Tee Higgins, pilares fundamentales en el esquema ofensivo del quarterback Joe Burrow.
Sin embargo, aún tienen temas pendientes en el vestidor, como la renovación del contrato del defensivo Trey Hendrickson, líder en capturas la temporada pasada. Hasta ahora, las negociaciones no han llegado a buen puerto.
La posibilidad de que Cincinnati pierda a su equipo de NFL inquieta tanto a la afición como a las autoridades locales. En las próximas semanas, se espera que las partes intensifiquen las conversaciones para intentar mantener a los Bengals en casa, aunque la opción de una nueva ciudad sigue latente.