Brett Favre, el icónico exmariscal de campo de los Green Bay Packers y miembro del Salón de la Fama de la NFL, ha sido diagnosticado con la enfermedad de Parkinson, según reveló el propio Favre en una reciente intervención en Washington D.C. Favre, quien también enfrenta acusaciones relacionadas con el mal uso de fondos federales, compartió la noticia durante su testimonio ante el Comité de Medios y Arbitrios de la Cámara de Representantes.

El exjugador de 54 años, conocido por su robusta carrera y su única victoria en el Super Bowl XXXI, expresó su desilusión por una inversión fallida en una empresa que buscaba desarrollar un tratamiento para las conmociones cerebrales. Favre tenía esperanzas de que este medicamento pudiera beneficiar a otros, pero ahora enfrenta su propio desafío de salud significativo.

La enfermedad de Parkinson, un trastorno neurológico progresivo, se manifiesta a través de síntomas como temblores, rigidez y dificultades con el equilibrio y la coordinación, impactando severamente la capacidad de realizar actividades diarias.

Favre, que también fue acusado de usar indebidamente conexiones políticas para dirigir fondos públicos hacia la University of Southern Mississippi—su alma máter y lugar de trabajo de su hija—continúa siendo una figura polarizadora tanto dentro como fuera del campo.

A lo largo de su carrera de 20 años, Favre jugó inicialmente para los Atlanta Falcons antes de unirse a los Packers, donde dejó una marca indeleble. También tuvo períodos con los New York Jets y los Minnesota Vikings antes de retirarse en 2010. Su inducción al Salón de la Fama en 2016 sirvió como un testamento a su destacada carrera en la NFL.

Este nuevo capítulo en la vida de Favre destaca la vulnerabilidad incluso de las figuras más emblemáticas del deporte y pone de relieve la importancia del apoyo y la concienciación sobre enfermedades como el Parkinson.