El delantero francés Ousmane Dembélé se coronó como el mejor jugador del planeta al recibir el Balón de Oro 2025, superando la expectación que rodeaba al joven talento Lamine Yamal. La incertidumbre terminó este lunes, cuando el atacante del Paris Saint-Germain fue reconocido por una temporada que lo convirtió en pieza clave de un año histórico para su club.

Dembélé brilló con 35 goles y 16 asistencias, liderando al PSG hacia un cuádruple de títulos, incluida la ansiada Liga de Campeones, la primera en la historia del equipo parisino. Su impacto ofensivo, determinante en cada competición, lo colocó por encima de otros candidatos, incluso frente a sus propios compañeros, pues el PSG contó con nueve nominados entre los 30 aspirantes al galardón.

Por su parte, Lamine Yamal, estrella emergente del Barcelona, se quedó con el Trofeo Kopa por segundo año consecutivo gracias a sus 21 goles y 22 asistencias. Aunque su talento a los 18 años promete marcar una era, sus cifras y la eliminación culé en semifinales de la Champions no fueron suficientes para arrebatarle el trono al francés.

Con este triunfo, Ousmane Dembélé escribe una página dorada en su carrera, consolidándose como referente absoluto del fútbol mundial y símbolo del éxito del Paris Saint-Germain.