El Dodger Stadium se vistió de nostalgia y homenaje en la apertura de la Serie Mundial 2024 entre los Dodgers de Los Ángeles y los Yankees de Nueva York. En el Juego 1, el equipo angelino rindió tributo al icónico lanzador mexicano Fernando Valenzuela, quien falleció recientemente, con un conmovedor homenaje que dejó a miles de aficionados con lágrimas y ovaciones.

Los gritos de “Fernando, Fernando” resonaron en las gradas, rememorando la “Fernandomanía” que cautivó tanto a los fanáticos de los Dodgers como a la comunidad latina en Estados Unidos durante los años 80. El homenaje comenzó antes del himno nacional de Estados Unidos, mientras una gigantesca bandera cubría el jardín del Dodger Stadium. La familia de Valenzuela, incluida su esposa Linda y sus hijos, fue presentada ante la multitud, visiblemente conmovida por el reconocimiento a la leyenda mexicana.

Uno de los momentos más simbólicos ocurrió cuando los exjugadores Orel Hershisher y Steve Yeager, MVP de la Serie Mundial de 1981, fueron llamados para realizar el primer lanzamiento ceremonial. Sin embargo, en un gesto emotivo, la pelota nunca fue lanzada al plato; en su lugar, terminó detrás de la lomita, justo debajo del icónico número 34 que perteneció a Valenzuela.

El estadio guardó un minuto de silencio en honor a “El Toro”, mientras la voz del Dodger Stadium sugirió a los fanáticos mirar al cielo, recordando las tantas veces que Fernando lo hizo antes de lanzar una de sus famosas curvas. Este momento fue un tributo perfecto a un jugador que no solo llevó al éxito a los Dodgers en la década de 1980, sino que también se convirtió en un ícono del béisbol mexicano y estadounidense.

Este emotivo homenaje reafirma el legado que Valenzuela dejó en la organización y en los corazones de millones de fanáticos. Su influencia en el equipo y su impacto en la cultura del béisbol siguen presentes, y su memoria fue honrada con la dignidad y el respeto que merece.

Foto: Captura (X)