El PSV Eindhoven, liderado por Hirving «Chucky» Lozano, aunque no necesitó estar presente en el campo desde el inicio, está a punto de coronarse campeón de la Eredivisie después de un aplastante triunfo de 8-0 sobre el Heerenveen. Este resultado coloca al equipo a una distancia casi insuperable de su más cercano perseguidor, el Feyenoord.
Desde el minuto 7, Malik Tillman se convirtió en el protagonista del encuentro, asistiendo y marcando dos goles que abrieron el camino hacia una goleada histórica. El equipo mostró una efectividad casi perfecta en su ataque, consolidando su liderazgo en la liga con una campaña impresionante.
El medio tiempo ya mostraba un claro 4-0, con dobletes de Tillman y Guus Til. En un gesto de respeto, Joey Veerman, exjugador de la cantera del Heerenveen y autor del quinto gol, no celebró su anotación, recibiendo aplausos de la afición rival.
La segunda mitad del juego continuó con la misma tónica, con Luuk de Jong y otros jugadores clave ampliando la ventaja. El ingreso de «Chucky» Lozano al minuto 62 solo añadió más dinamismo al ataque del PSV, que cerró el marcador con un contundente 8-0, cortesía de Patrick van Aanholt.
Ahora, PSV se encuentra a 12 puntos de distancia del Feyenoord, con solo tres juegos restantes. La diferencia de goles y el número de puntos hacen casi imposible que el Feyenoord alcance al PSV, incluso si gana sus próximos partidos. Todo apunta a que, a menos de un milagro, el título se quedará en Eindhoven esta temporada.
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