El Inter de Milán selló su boleto a las semifinales de la UEFA Champions League tras un intenso empate 2-2 frente al Bayern Munich, haciendo valer la ventaja obtenida en la ida para un marcador global de 4-3. Con la pelota parada como su principal arma y el carácter de sus referentes, el conjunto italiano supo resistir y golpear en los momentos clave.

El triunfo conseguido por 2-1 en Alemania había dejado a los nerazzurri con una ligera ventaja. Conscientes de ello, desde el inicio del partido en el Giuseppe Meazza, plantearon un encuentro cerrado, con un mediocampo denso que anuló la circulación del cuadro bávaro durante todo el primer tiempo.

Pero el equilibrio se rompió en la segunda mitad cuando Harry Kane aprovechó un rebote para abrir el marcador y sembrar tensión entre los locales. Lejos de derrumbarse, el Inter reaccionó con jerarquía. Primero fue Lautaro Martínez, que igualó tras un córner, y luego Benjamin Pavard, quien con un certero cabezazo puso el 2-1 que parecía sentenciar la eliminatoria.

A pesar del descuento de Eric Dier, también de cabeza, el Bayern no logró el gol adicional que necesitaba para forzar el alargue. El Inter manejó con inteligencia los minutos finales y selló su pase entre los cuatro mejores de Europa.

Con esta victoria, el equipo dirigido por Simone Inzaghi enfrentará en la siguiente fase al Barcelona, mientras que el otro cruce será protagonizado por el Arsenal y el PSG. Así, el Inter vuelve a meterse entre los grandes del continente con la ambición intacta de conquistar una nueva Champions League.