Isaías Violante, nuevo refuerzo del Club América, sorprendió con la elección del dorsal 12 a su llegada al equipo. A diferencia de los números habituales para un extremo, Violante reveló que esta decisión tiene un profundo significado personal: es un homenaje a su padre.

A sus 21 años, el veracruzano compartió que, aunque su padre no fue futbolista profesional, siempre usó el número 12 en sus partidos amateurs. Desde que era niño, Isaías también fue vinculado a ese número, y ahora, en su nueva etapa con las Águilas, decidió retomarlo como una forma de mantener vivo el recuerdo de su papá, quien falleció en 2021.

“Cuando llegué aquí lo pedí porque en Toluca jugaba con el 190. Justo pasó eso cuando él falleció y pensé en su honor usar el número que a él le gustaba”, relató.

Antes de su fallecimiento, su padre pudo ver el debut profesional de Isaías con Toluca y su participación en una Liguilla. Uno de los recuerdos más valiosos para el joven jugador fue haber disputado un partido contra Cruz Azul, el equipo favorito de su padre, en el Estadio Azteca. “Creo que fue el recuerdo más bonito que se pudo llevar”, mencionó.

En esta nueva etapa, Violante no está solo. Su excompañero en Toluca, Maxi Araujo, hoy en la liga portuguesa, pidió a Sebastián Cáceres y Brian Rodríguez, jugadores del América y también uruguayos, que lo acompañen y lo orienten. Isaías se mostró agradecido: “Sé que esos jugadores de talla internacional me enseñan todos los días”.

Con esta mezcla de talento, memoria y respaldo, Isaías Violante comienza su camino en el América con una historia que va más allá del fútbol y conecta directamente con sus raíces y afectos.