A poco más de un año para la Copa del Mundo 2026, Javier Aguirre, técnico de la Selección Mexicana, aún mantiene una gran duda: quién ocupará la lateral derecha, posición clave y sin dueño claro en el plantel. Mientras que para casi todas las demás posiciones ya cuenta con candidatos definidos, la elección del lateral derecho sigue siendo un enigma.

Rodrigo Huescas, jugador del Copenhague de Dinamarca, parecía ser la opción más firme, pero una sanción legal por exceso de velocidad lo dejó fuera de la convocatoria para la Copa Oro 2025, último torneo oficial antes del Mundial. Aguirre, fiel a su exigencia de disciplina y compromiso, dejó claro que las cuestiones extradeportivas pesan tanto como el talento: “He pedido seriedad 365 días, las 24 horas, los siete días de la semana. Las leyes son las leyes y hay que respetarlas”.

Ante la ausencia de Huescas, el entrenador ha probado a siete futbolistas para esa posición, incluyendo a Jorge Sánchez, Emilio Lara, Alan Mozo, Julián Araujo, José Ramírez, Israel Reyes y José Castillo, pero ninguno ha logrado convencer plenamente. En los últimos encuentros previos a la Copa Oro, Aguirre alternó entre Sánchez y Lara, en busca del perfil ideal.

En contraste, otras zonas del equipo están más definidas. En la portería, Guillermo Ochoa, Luis Malagón y ‘Tala’ Rangel compiten por un lugar; en defensa, César Montes y Johan Vásquez parecen inamovibles; mientras que en el mediocampo Edson Álvarez y Erick Lira han ganado confianza. En el ataque, Raúl Jiménez es titular indiscutible, con Santiago Giménez, César Huerta y Alexis Vega en la pelea por un puesto.

Aguirre está cerca de dirigir su tercer Mundial con México y la resolución de la lateral derecha será uno de los retos más importantes para completar el plantel que enfrentará el torneo más esperado en casa.