Lakers apuestan por Doncic y relegan a LeBron: el cambio generacional ya comenzó
Los Los Angeles Lakers han dejado clara su intención de abrir un nuevo capítulo en su historia al centrar sus planes a futuro en Luka Doncic, desplazando poco a poco a su veterana estrella LeBron James, quien durante más de siete años fue el rostro indiscutible de la franquicia. La cena secreta en Craig’s, uno de los restaurantes más exclusivos de West Hollywood, marcó simbólicamente este cambio: Doncic fue el invitado central en una reunión estratégica con el gerente general Rob Pelinka y el nuevo entrenador JJ Redick, mientras James brilló por su ausencia.
El encuentro, cuidadosamente filtrado a medios y redes sociales, tenía un solo mensaje: Doncic es ahora la prioridad. Pelinka expuso los planes de la franquicia, ajustados al nuevo convenio colectivo, destacando cómo construirán un equipo alrededor de las virtudes del esloveno. La misma carpeta de estrategias que antes se presentaba a James fue ahora desplegada para Doncic. El objetivo es claro: lograr que el jugador firme una extensión multimillonaria y se convierta en la nueva cara de los Lakers.
Mientras tanto, LeBron James, aunque todavía vinculado al equipo para la temporada 2025-26 gracias a una opción de jugador de $52.6 millones, empieza a ser tratado como una pieza prescindible. La franquicia no le ofreció una extensión de contrato, marcando por primera vez un final programado a su era en Los Ángeles. Fuentes cercanas revelan que James ha sentido el cambio, desde las decisiones no consultadas —como el traspaso de Anthony Davis por Doncic— hasta señales más sutiles como no haber sido notificado de la venta parcial del equipo a Mark Walter, algo que sí ocurrió con Luka.
A pesar de todo, el entorno de James ha mantenido un tono diplomático. Rich Paul, su agente y confidente, reconoció que es momento de evaluar qué es lo mejor para el futuro de LeBron, abriendo la puerta a una eventual salida. La incertidumbre ya generó repercusiones: agentes libres como Brook Lopez descartaron a los Lakers por el ambiente inestable. A nivel interno, el jugador ha respondido con gestos simbólicos en redes sociales, haciendo referencia a sus días en Cleveland y enviando señales veladas sobre un posible retorno a su ciudad natal o un nuevo destino.
James construyó su vida en Los Ángeles dentro y fuera de la cancha, pero las decisiones recientes de los Lakers indican que ese ciclo está llegando a su fin. Por primera vez en 23 temporadas, un equipo no está dispuesto a moldear su presente y futuro alrededor suyo. Con Doncic como el nuevo eje, y sin una renovación en el horizonte, todo apunta a que la primavera de 2026 marcará la despedida definitiva de LeBron con la camiseta púrpura y dorada.
El final de una era ya está escrito, y el legado de James en los Lakers comienza a ceder espacio al futuro prometedor que la franquicia ve en Luka Doncic.