El Manchester United, uno de los clubes más emblemáticos del fútbol mundial, atraviesa una de sus etapas más oscuras en la era moderna. La reciente derrota ante el Tottenham en la final de la Europa League 2025, disputada en Bilbao, se suma a una larga lista de fracasos continentales que confirman su trágico declive competitivo en lo que va del siglo XXI.

Con la caída en el Estadio San Mamés, los Red Devils acumulan ya seis finales europeas perdidas desde el año 2001, consolidando una racha histórica que contrasta brutalmente con su glorioso pasado. En esta ocasión, el verdugo fue un Tottenham que no alzaba un trofeo europeo desde 1984, lo que hace aún más dolorosa la derrota para la afición del United.

Entre las finales más recordadas figuran las dos caídas en la Champions League ante el Barcelona. En 2009, los goles de Eto’o y Messi sellaron el triunfo catalán en Roma frente a un United liderado por Cristiano Ronaldo. Dos años más tarde, en Wembley, nuevamente Messi, Pedro y Villa fueron implacables ante un conjunto inglés que alineó al mexicano Javier “Chicharito” Hernández como titular.

La Europa League tampoco ha sido indulgente con el club. En 2021, el Villarreal conquistó su primer título tras un maratónico duelo que se decidió en una tanda de 22 penales, dejando otra huella amarga en la historia reciente del equipo. La lista continúa con las derrotas en la Supercopa de Europa en 2008 y 2017, frente al Zenit y Real Madrid, respectivamente, y una más en 1999 ante la Lazio.

El técnico Ruben Amorim, consciente del peso histórico del encuentro en Bilbao, expresó antes del partido que ganar era crucial, tanto por el prestigio como por el boleto a la próxima Champions League. “Estos partidos hay que ganarlos. Si no, solo queda la tristeza”, confesó en declaraciones a UEFA. Sus palabras, hoy, suenan como presagio del posible fin de su ciclo en Old Trafford.

Más allá del revés continental, la situación interna del club es igualmente alarmante: el United podría cerrar la temporada entre los cinco peores equipos de la Premier League, una realidad que parecía impensable hace apenas unos años.

Así, el Manchester United, que alguna vez fue sinónimo de dominio y grandeza, vive una tragedia deportiva sin final claro. Lo que alguna vez fue una dinastía, hoy se tambalea entre la frustración y la incertidumbre, dejando a su fiel afición con una pregunta que se repite como eco: ¿cuándo volverán los días de gloria?