Omar Marmoush ha demostrado ser el refuerzo que el Manchester City y Pep Guardiola tanto necesitaban. Su triplete en 14 minutos en la victoria 4-0 contra el Newcastle resaltó la urgencia con la que el club requería una solución ofensiva.

El delantero egipcio, fichado en enero por 59 millones de libras desde el Eintracht Frankfurt, llenó el vacío dejado por Julián Álvarez, quien se marchó al Atlético de Madrid por 82 millones de libras. Sin embargo, su llegada podría haber sido demasiado tardía para cambiar por completo el rumbo de la temporada.

Con la Premier League casi fuera de su alcance y una derrota por 3-2 ante el Real Madrid en la ida de los playoffs de la Champions, el City no tiene margen de error. No obstante, la goleada ante Newcastle ha revitalizado al equipo antes de una semana crucial, enfrentando al Real Madrid en el Santiago Bernabéu y luego al Liverpool, líder de la liga.

La actuación de Marmoush evidenció su capacidad goleadora y su impacto inmediato. Su primer gol fue una definición magistral tras un pase largo de Éderson, el segundo un disparo preciso tras dejar atrás a Kieran Trippier, y el tercero demostró su lectura de juego al encontrar espacio dentro del área.

Guardiola destacó su habilidad para atacar los espacios y generar opciones en ofensiva. “Es un jugador que hemos extrañado. Nos da tiempo y opciones”, afirmó el técnico español. Sin Álvarez, el peso del gol ha recaído sobre Erling Haaland, quien lleva 19 goles en todas las competiciones, seguido de Phil Foden con 7.

El City necesitará más de Marmoush si quiere revertir la eliminatoria ante el Real Madrid y frenar al Liverpool. Su impacto ha sido inmediato, pero el verdadero desafío está por venir.