Novak Djokovic se encuentra en un momento de reflexión sobre su carrera en el tenis tras el reciente fin de su colaboración con el entrenador Goran Ivanisevic. El serbio, conocido por sus logros impresionantes en el deporte, incluyendo semifinales en el Open de Australia y la tercera ronda en Indian Wells esta temporada, ha dejado abierto el futuro respecto a su dirección técnica.
Djokovic ha mencionado la posibilidad de continuar sin un entrenador fijo, una decisión inusual para un jugador de su calibre. «No sé quién será mi nuevo entrenador o si llegará a tener alguno», expresó Djokovic, indicando su deseo de explorar qué necesita realmente para sentirse cómodo y eficaz en el circuito.
La ruptura con Ivanisevic, quien había sido el único entrenador oficial del serbio esta temporada, se describió como una separación positiva. Durante este período de transición, Djokovic ha sido visto entrenando en Belgrado con Nenad Zimonjic, ex capitán serbio de Copa Davis, sugiriendo un enfoque más introspectivo hacia su preparación y estrategia de juego.
Esta fase de autoexploración llega mientras Djokovic continúa dominando el ranking mundial, asegurando su posición como número uno hasta al menos el 5 de mayo, cuando concluye el Mutua Madrid Open. Con 418 semanas en la cima, duplicando a su rival Rafael Nadal, Djokovic defiende relativamente pocos puntos hasta Roland Garros, en comparación con sus competidores más cercanos, Carlos Alcaraz y Jannik Sinner.
La decisión de Djokovic de posiblemente seguir adelante sin un entrenador destaca su confianza en su capacidad para autogestionar su carrera y preparación. A medida que se prepara para regresar a la competición en el Masters 1000 de Montecarlo del 7 al 14 de abril, el tenis mundial observa atentamente cómo esta nueva fase influirá en el rendimiento y la estrategia del campeón serbio en la búsqueda de más títulos y logros históricos.