Pep Guardiola, entrenador del Manchester City, bromeó sobre la posibilidad de tomarse un descanso en su carrera, siguiendo el consejo de su exasistente Carles Planchart. En rueda de prensa previa al duelo de Premier League contra el Everton, el técnico español señaló que será hasta 2035 cuando empiece a considerar esa opción, dejando claro que por ahora mantiene su compromiso con el club.

“Hemos cambiado mucho en el último año y la energía tanto del cuerpo técnico como de los jugadores nuevos sigue intacta. En mis etapas en Barcelona y Bayern Munich, ante algún problema habría dado un paso al lado, pero aquí no ha sido necesario”, explicó Guardiola, quien tiene contrato vigente hasta la temporada 2026-2027.

El técnico enfatizó que sigue motivado y que su objetivo es mejorar los resultados respecto a la temporada anterior. “Aún tengo energía y creo que podemos superarnos. Cada partido nos hace mejores y hay margen de mejora, eso me mantiene aquí”, agregó el estratega de Sampedor, actualmente el cuarto técnico más longevo en la historia de la Premier League, con 9 años y 3 meses al frente del Manchester City.

Guardiola también se refirió a la situación de Jack Grealish, cedido al Everton, quien no podrá enfrentar a los ‘Citizens’ debido a las normas de préstamo en la Premier League. “Son las reglas. Si fuera CEO o presidente de un gran club en Inglaterra, quizá cambiaría esto. Pero por ahora no tengo opinión”, indicó. El extremo inglés, ganador del premio al mejor jugador de agosto, ha tenido un inicio destacado con un gol y cuatro asistencias en siete jornadas, consolidando su regreso al ritmo competitivo que buscaba.

El entrenador resaltó el impacto positivo de Grealish en el Everton y señaló que las cláusulas de cesión, conocidas como “cláusulas del miedo”, buscan evitar conflictos de interés y proteger los intereses deportivos del club prestamista, una normativa estricta que se aplica de manera general en el fútbol inglés, a diferencia de otros países europeos.