En un emocionante clásico disputado en el Santiago Bernabéu, Real Madrid logró una crucial victoria por 3-2 contra el FC Barcelona, dejando al equipo catalán a once puntos de distancia en la lucha por el título de LaLiga. Con esta remontada, los merengues se acercan al campeonato, dominando la tabla con una ventaja significativa y solo seis jornadas restantes.
El partido comenzó con un tempranero gol de Andreas Christensen para Barcelona, poniendo presión sobre los locales. Sin embargo, Real Madrid no tardó en responder, con Vinicius Junior igualando el marcador a través de un penalti perfectamente ejecutado. Aunque Fermín López volvió a poner al Barcelona adelante en el segundo tiempo, Lucas Vázquez igualó nuevamente antes de que Jude Bellingham, en el tiempo añadido, marcara el gol de la victoria, destacando su importancia en los momentos críticos del encuentro.
Este triunfo no solo refuerza la posición de Real Madrid en la cima, sino que también reduce las posibilidades de Barcelona de alcanzar el liderato, necesitando ahora un descalabro casi imposible de los madrileños para poder soñar con el título. El gol decisivo de Bellingham y la constante presión ofensiva de los blancos demostraron una vez más su capacidad para superar adversidades y salir adelante en los momentos clave.
El partido no estuvo exento de polémica, con varias decisiones arbitrales disputadas que podrían haber cambiado el curso del juego, incluyendo un penal no concedido a Barcelona y un gol anulado por el VAR. A pesar de estos contratiempos, el Real Madrid mostró su carácter y logró mantenerse firme para asegurar los tres puntos.
El resultado deja a Real Madrid en una posición dominante para asegurar el título de LaLiga, mientras que Barcelona tendrá que concentrarse en consolidar su posición en la tabla y prepararse para los desafíos futuros. Con el final de la temporada acercándose, cada partido será decisivo, pero con la victoria en el clásico, los merengues tienen la liga casi asegurada.