El deporte vivió un giro inesperado este miércoles 30 de abril de 2025: Lionel Messi, Cristiano Ronaldo y LeBron James, tres íconos considerados GOATs (Greatest of all Time), fueron eliminados de sus respectivas competencias, encendiendo las alarmas sobre el ocaso de una era dorada.

El argentino Messi, figura del Inter Miami, fue eliminado en las semifinales de la Concacaf Champions Cup ante los Vancouver Whitecaps, dejando atrás una campaña que prometía más, tras conquistar la Leagues Cup y la Supporter’s Shield en 2024. Aunque ha mostrado momentos brillantes en la MLS, la derrota expone los límites de un equipo aún en construcción.

Horas antes, en Jeddah, Cristiano Ronaldo vivió otro duro revés con el Al Nassr, que cayó 2-3 frente al Kawasaki Frontale en las semifinales de la Liga de Campeones de Asia. Desde su llegada al fútbol saudí, el astro portugués solo ha sumado títulos amistosos, mientras la inversión millonaria del club sigue sin traducirse en triunfos relevantes. Las críticas en redes sociales por errores puntuales y su imagen desconsolada en el campo reflejaron el creciente desencanto.

La jornada cerró con el tercer golpe: LeBron James y sus Los Angeles Lakers fueron eliminados de los playoffs de la NBA por los Minnesota Timberwolves. Con 40 años y una trayectoria legendaria, James dejó abierta la duda sobre su continuidad en la liga, afirmando no tener aún una respuesta sobre su futuro.

A pesar de la coincidencia amarga, nada puede empañar las carreras de estos tres colosos, cuya dominación de dos décadas transformó el fútbol y el baloncesto. Los debates sobre si superaron a figuras como Pelé, Maradona o Michael Jordan seguirán vigentes, pero lo cierto es que el legado de Messi, Cristiano y LeBron ya está sellado en la historia.

Este infortunado miércoles no simboliza una despedida definitiva, sino un recordatorio de que incluso los más grandes enfrentan el paso del tiempo. Y aunque el final se vislumbra cercano, su historia aún podría reservar una última ovación.