En un emocionante encuentro por las semifinales de la Copa Asiática, Catar logró vencer a Irán con un marcador de 3-2, clasificándose así a la final donde se enfrentará a Jordania. El partido, disputado en Doha, estuvo lleno de alternativas y podría haber caído de cualquier lado, destacándose por su intensidad y los momentos palpitantes que mantuvieron a los espectadores al filo de la silla hasta el último minuto.

Irán se adelantó tempranamente en el marcador gracias a un gol de Sardar Azmoun apenas a los 4 minutos de juego, pero Catar, el equipo anfitrión y vigente campeón, no tardó en responder. Akram Afif, una de las figuras claves del equipo qatarí, contribuyó significativamente al resultado; primero asistiendo a Jassem Gaber para el empate y luego marcando el segundo gol para su equipo antes del descanso.

En la segunda mitad, Irán consiguió igualar el marcador a través de un penal convertido por Alireza Jahanbakhsh, pero fue Ali Almoez quien finalmente marcó el gol decisivo para Catar, aprovechando un rechace a escasos minutos del final. A pesar de la expulsión de un jugador iraní y los trece minutos de tiempo añadido, el marcador no cambió, sellando la victoria para Catar y su paso a la final.

Este triunfo no solo permite a Catar avanzar a la final en busca de su segundo título continental consecutivo, sino que también refuerza el liderazgo de su técnico español ‘Tintín’ Márquez. Por otro lado, para Irán, este resultado significa prolongar la espera para reencontrarse con la gloria de sus títulos pasados, remontándose a las décadas de 1960 y 1970.

La final promete ser un espectáculo emocionante, con Catar enfrentándose a Jordania, este último equipo sorprendió al eliminar a la favorita Corea del Sur en su respectiva semifinal.

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