Tua Tagovailoa Sufre Tercera Conmoción Cerebral: Preocupación por su Futuro en la NFL
Tua Tagovailoa, mariscal de campo de los Miami Dolphins, enfrentó su tercera conmoción cerebral durante un juego contra los Buffalo Bills el pasado jueves, intensificando las preocupaciones sobre su salud y continuidad en la NFL. Este reciente incidente pone en duda su participación en los próximos partidos de la temporada, mientras sigue el protocolo establecido por la liga para conmociones cerebrales.
Incidente Durante el Juego
El episodio ocurrió en el tercer cuarto del partido cuando Tagovailoa intentaba avanzar por el centro y sufrió un fuerte golpe al contactar con Damar Hamlin, profundo de los Bills. El impacto resultó en una “respuesta de esgrima”, una postura antinatural de los brazos que indica una lesión cerebral grave. Aunque Tagovailoa pudo salir del campo por su propio pie, fue descartado para el resto del juego y su estado para futuros encuentros sigue siendo incierto.
Historial de Lesiones
La carrera de Tagovailoa ha estado marcada por lesiones significativas, comenzando desde su etapa universitaria en Alabama, donde sufrió una dislocación de cadera y una fractura que puso en peligro su carrera profesional. A esto se suman múltiples conmociones cerebrales y otras lesiones que han suscitado dudas sobre su durabilidad en la NFL.
Decisiones Post-Temporada 2022
Después de enfrentar serias lesiones en la cabeza en 2022, Tagovailoa contempló la posibilidad de retirarse del deporte, influenciado por conversaciones con su familia. Sin embargo, optó por continuar y enfocarse en su acondicionamiento físico, incluyendo entrenamiento de jiujitsu para aprender técnicas de caída que minimicen el impacto en su cabeza.
Futuro en la NFL
Con un partido próximo contra los Seattle Seahawks y bajo el seguimiento del protocolo de conmociones, los Dolphins deben evaluar cuidadosamente la situación de Tagovailoa. Existe la posibilidad de que el jugador sea puesto en reserva por lesión si su recuperación no avanza como se espera, lo que podría acabar prematuramente con su temporada.
Este incidente reaviva el debate sobre la seguridad en la NFL y el manejo de las conmociones cerebrales, un tema crítico que la liga continúa enfrentando en su esfuerzo por proteger la salud de sus jugadores.