El Monte Etna, ubicado en la costa este de Sicilia, Italia, entró en erupción el 2 de junio de 2025, generando una enorme columna de humo y ceniza que alcanzó varios kilómetros de altura.

El Etna es uno de los volcanes más activos del mundo, con erupciones frecuentes. En 2021, registró 11 erupciones en solo tres semanas, y en 2024, tuvo al menos dos eventos importantes que obligaron al cierre del aeropuerto de Catania.

Turismo y visitas al Etna

A pesar de su actividad volcánica, el Etna sigue siendo un destino turístico clave en Sicilia. Se estima que recibe un promedio de 700,000 visitantes al año, quienes exploran sus senderos y cráteres activos.

Impacto de la erupción

El evento tomó por sorpresa a turistas que se encontraban en la zona, quienes tuvieron que correr para huir de los flujos piroclásticos y la lluvia de cenizas. Videos compartidos en redes sociales muestran a visitantes descendiendo apresuradamente por senderos del volcán mientras la erupción se intensificaba.


Las autoridades italianas elevaron el nivel de alerta en el aeropuerto de Catania, aunque no se registraron interrupciones inmediatas en sus operaciones. Afortunadamente, no se reportan heridos, pero se ha restringido el acceso a la cima del Etna como medida preventiva.

Parece que el Etna decidió recordarles a los turistas que la naturaleza no es solo un espectáculo, sino también una fuerza impredecible. Nada como una erupción para acelerar el paso en una caminata escénica.