El presidente Donald Trump anunció el domingo que las acciones de México contra el tráfico de fentanilo no son suficientes y, por ello, impondrá un arancel del 25% al acero y aluminio de Canadá y México, los principales exportadores a Estados Unidos.

La Asociación de Productores de Acero de Canadá advirtió que esta medida tendrá efectos “devastadores” y solicitó al primer ministro Justin Trudeau que tome represalias. Trump confirmó la decisión durante una conversación con periodistas en el Air Force One, camino a Nueva Orleans para asistir al Super Bowl. Trump señaló que las acciones de México en temas de inmigración y narcotráfico no son suficientes y que tomará medidas para cambiar la situación, agregando que no permitirá que Estados Unidos mantenga un déficit comercial con México.

El arancel afectará industrias claves de Estados Unidos como la defensa, la construcción de barcos y la producción de autos, ya que Canadá es el mayor proveedor de acero y aluminio del país. El ministro de Industria de Canadá, Francois-Philippe Champagne, recordó en X que estos materiales son insumos básicos para dichas industrias.

El anuncio rompe un acuerdo reciente entre Estados Unidos y México que buscaba reforzar la seguridad fronteriza. Claudia Sheinbaum había asegurado que los aranceles tendrían “una pausa permanente”. Desde Japón, el vocero gubernamental, Yoshimasa Hayashi, expresó que estudiarán la medida y su influencia antes de tomar acciones adecuadas.

La medida de Trump se enmarca en su intención de reindustrializar Estados Unidos. Anteriormente, se opuso a la compra de US Steel por parte de la japonesa Nippon Steel. La preocupación por la adquisición de industrias estratégicas por empresas extranjeras es compartida por ambos partidos políticos en Estados Unidos.