La salud mental es tan importante como la salud física.
Uno de los desafíos de salud pública más difíciles de nuestro tiempo es la lucha contra el estigma en relación con la salud mental. Aunque las condiciones de salud mental son muy comunes en todo el mundo, las personas que viven con ellas muy a menudo experimentan discriminación y son tratadas de manera diferente. El miedo, la incomprensión y los prejuicios contribuyen al estigma, la exclusión social y la discriminación que ocurre alrededor de las personas que viven con condiciones de salud mental. Puede ocurrir con los amigos o miembros de la familia y en todos los ámbitos de la vida: en el hogar, la escuela, el lugar de trabajo y en el hospital, tanto en entornos rurales como urbanos.
A diario alrededor del mundo las personas enferman o sufran accidentes, muchos de ellos pueden ser visibles y detectadas casi con facilidad, por ejemplo, si alguien se quiebra la pierna, sabemos que esa persona tiene dolor en esa parte del cuerpo. Pero ¿Qué pasa cuando las heridas no son visibles? Cuando todo está en la mente.
Muchas de estas personas no están informadas sobre la importancia de la salud mental y otras tantas, son incapaces de pedir ayuda por culpa del estigma y discriminación que hay para este tipo de padecimientos, pese a estar en pleno siglo XXI.
La ayuda psicológica no hace magia, sanar la mente no es un camino sencillo, por lo que se necesita paciencia y bastante tiempo (según el paciente) para lograr obtener pequeños cambios.
Si se lograra hablar con naturalidad y normalidad sobre la salud mental, sería más fácil acceder a ella. La finalidad es hacer más fácil la vida para todos, una sociedad sana es más feliz.
Recuperarse de las condiciones de salud mental es posible. Sin embargo, el estigma y la discriminación se interponen e impiden que las personas busquen y obtengan la ayuda y la atención que necesitan en el camino a la recuperación.
¿Qué es el estigma?
Es una marca que excluye a una persona de las demás y que disminuye su valor en el grupo social al que pertenece. También se refiere a la actitud y comportamientos negativos hacia las personas con problemas por consumo de sustancias y de salud mental. Puede ser duradero y poner en peligro la vida más que la condición de salud mental.
¿Qué es la discriminación?
Es una acción o decisión que amenaza a una persona o a un grupo de personas de forma diferente y que puede estar basada en la raza, el origen nacional o étnico, el color, la religión, el sexo, la edad o la discapacidad física o mental. Las personas que viven con una condición de salud mental que sufren discriminación también encuentran barreras en la búsqueda y el mantenimiento de trabajo, una vivienda segura y servicios de atención médica. También tiene un impacto en la interacción social con los miembros de la familia, amigos y con la comunidad.