La Plaza de San Pedro en la Ciudad del Vaticano está repleta de fieles católicos que han llegado de todo el mundo para rendir homenaje en el funeral del Papa Francisco. Aunque la plaza ha alcanzado su capacidad máxima, la gente sigue llegando, colmando los alrededores de la basílica.

La escena es conmovedora, con peregrinos de diversas nacionalidades y edades unidos en su fe y respeto por el difunto Papa. La plaza, diseñada por Bernini en el siglo XVII, es un espacio emblemático de la Iglesia Católica y ha sido testigo de numerosos eventos históricos.