México: De productor a consumidor de fentanilo, alerta la ONU
4 de marzo de 2025 – México, tradicionalmente identificado como un centro de producción y exportación de fentanilo, enfrenta ahora una creciente crisis interna como país consumidor de este opiáceo sintético, que es 50 veces más potente que la heroína. Según un informe de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) publicado este martes, la demanda de tratamiento por consumo de fentanilo ha aumentado alarmantemente en los últimos años.
De acuerdo con el Informe 2024, mientras antes de 2018 la necesidad de tratamientos relacionados con el fentanilo era prácticamente inexistente, en 2023 se registraron 430 casos, principalmente en estados fronterizos como Baja California, Chihuahua y Sonora, además de Sinaloa. Este aumento refleja un cambio significativo, posicionando a México como un mercado en crecimiento para esta droga.
El consumo de fentanilo ha llevado al 60 % de los pacientes tratados en 2023 por la ONG Centros de Integración Juvenil a buscar atención debido a problemas relacionados con el abuso de sustancias. Además, el cannabis, la metanfetamina y la cocaína siguen siendo las drogas más comunes entre quienes acuden a estos centros.
En relación con el cannabis, un sondeo de 2023 mostró que el 26.9 % de los encuestados lo había consumido al menos una vez, iniciando a una edad promedio de 20 años. De estos usuarios, el 19.5 % continúa consumiéndolo regularmente, y un 34.7 % lo hace diariamente o casi a diario.
Por otro lado, la JIFE reveló la preocupante venta de fármacos falsificados en farmacias del norte de México, dirigidos a turistas extranjeros. Entre estos se encuentran metanfetaminas etiquetadas como Adderall y comprimidos de fentanilo mezclado vendidos como oxicodona.
Conclusión: El aumento en el consumo de fentanilo representa un grave desafío para México, que ahora no solo debe lidiar con su producción y exportación, sino también con las consecuencias de su creciente uso interno. La necesidad de estrategias integrales de prevención y tratamiento es más urgente que nunca, para frenar el avance de esta crisis.