El Fiscal Zona Centro, Heliodoro Araiza, informó que el pasado viernes se realizaron cambios en las medidas cautelares para las personas físicas sujetas al proceso de ARAS, la empresa imputada por fraude con penalidad agravada. Se confirmó que todos están ahora en arresto domiciliario y que aquellos que llevan brazaletes electrónicos seguirán con medidas restrictivas, como lo dicta la ley. La decisión se basó en la ejecución de un recipiente electrónico, y se destacó que, a partir del jueves, los bienes decomisados ya se encuentran en su domicilio.
Además, se anunciaron cambios en las medidas para algunos de los detenidos. Armando G. y Óscar Gonzálo H. deberán colocarse brazaletes electrónicos, mientras que Diana C. continuará con prisión domiciliaria, y Jocelyn G. llevará su proceso en libertad.
La semana pasada, el Fiscal General del Estado, Cesar Jauregui Moreno, informó que ARAS, como persona moral, fue imputada y sentenciada por fraude con penalidad agravada. Se reveló que los bienes valuados en aproximadamente 500 millones de pesos fueron asegurados y serán liquidados a favor del Estado para reparar el daño sufrido por las víctimas. Sin embargo, esta cifra no alcanza para la reparación total de todas las víctimas.
El proceso de ejecución de sentencia estará bajo la supervisión de un fideicomiso gestionado por la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas del Estado. La sentencia implicó la disolución de ARAS para prevenir la dilapidación de bienes y garantizar una reparación integral del daño. La fecha para la lectura de sentencia se fijará próximamente, y se proporcionará un engrose de la misma a todas las partes involucradas dentro de los plazos procesales establecidos.